Cómo evitar ser dolor después de hacer ejercicio

Si alguna vez has sentido dolor inmediatamente después de un entrenamiento o la mañana siguiente, que es causado por la tensión en el tejido muscular, el ácido láctico acumulado en su cuerpo durante el entrenamiento y el esfuerzo del cuerpo para reparar los tejidos dañados. Durante una sesión de ejercicios de rutina o intensa, los vasos sanguíneos se ensanchan para permitir un mayor flujo sanguíneo y la circulación. El ácido láctico utiliza los vasos dilatados como un canal para el tejido muscular, lo que puede causar dolor. Para disminuir o evitar estar adolorido después de un entrenamiento, tome las precauciones necesarias antes y después de su sesión.

Dificultad: Fácil Moderadamente Instrucciones

Realizar cardio ligero o estirar ejercicios de calentamiento antes de una sesión de entrenamiento para aumentar su ritmo cardíaco, aflojar los músculos y obtener la sangre que fluye. Si va a realizar una sesión de footing, caminar suavemente durante unos cinco minutos para calentar la parte superior e inferior del cuerpo por lo que no están adoloridos después de su desplazamiento. Si va a realizar una carrera de velocidad o de larga distancia plazo, realizar un trote informal como un calentamiento. Para musculación entrenamientos, realizar estiramientos ligeros en los tendones y los músculos para que no se hace una herida o tenga molestias durante y después de su entrenamiento.

Hidrátese antes, durante y después de sus entrenamientos. Beba mucha agua o bebidas de reposición de proteínas, que ayudan a reparar los tejidos dañados. Aunque el tejido dañado se cura con el tiempo, su cuerpo se convertirá en dolor como resultado.

Realizar la actividad cardio ligero o estiramientos después del entrenamiento. Al igual que en los ejercicios de calentamiento, ejercicios de enfriamiento aliviar gradualmente el cuerpo desde una actividad muscular intensa a un estado normal. El cambio suave de activo a inactivo puede ayudar a prevenir el dolor de ser después de un entrenamiento.

Tome una ducha fría o un baño después de su entrenamiento. Debido a que sus vasos sanguíneos se ensanchan para el máximo flujo de sangre durante un entrenamiento, la temperatura de un baño de agua fría está diseñada para ayudar a constreñir los vasos sanguíneos y reducir el dolor y el dolor muscular al día siguiente.